Lacalle Pou inauguró planta de producción de empresa La Trigueña

El presidente Lacalle Pou visitó las instalaciones que incorporó la empresa alimenticia La Trigueña en la zona de Lagomar, en Canelones. La planta de producción de 5.000 metros cuadrados demandó una inversión superior a los 9 millones de dólares y permitirá triplicar la producción.
Asistieron además del mandatario el ministro de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini; el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres; el intendente de Canelones, Yamandú Orsi, y el embajador de España ante Uruguay, José Gómez-Llera.
La Trigueña, empresa familiar con 34 años de trayectoria, fue fundada en Lagomar en el departamento de Canelones en el año 1987, pero la historia de Anselmo y su familia comenzó en 1965 cuando llegaron al país. El director y fundador de La Trigueña, Anselmo Pereira, recordó su historia familiar. Asimismo, consideró con entusiasmo que este paso es “una apuesta al país; nos estamos tirando al agua con la convicción de que nos va a ir bien”.
La empresa de capitales nacionales fue fundada en 1987, y el objetivo de esta ampliación es diversificar la oferta de productos y abrirse a nuevos mercados de exportación. Antes del corte de cinta, Lacalle Pou recorrió las instalaciones junto al fundador de la empresa, Anselmo Pereira, y el director Ruben Pereira, quienes le informaron sobre el proceso productivo.
Paganini destacó que se trata de una iniciativa familiar, uruguaya, con gran trayectoria y tecnología que aporta empleo y fue pensada para la exportación en un mundo abierto y competitivo. “Este es el Uruguay pospandemia que queremos, que sale a ganar el campeonato en la cancha y que demostró que lo puede hacer. Tenemos las condiciones y son reconocidas en el mundo”, evaluó. “Hemos podido mantener abierta la economía y ahora es tiempo de crecer y desarrollarse”, apuntó.
Por su parte, Anselmo Pereira realizó una reseña histórica sobre la empresa que se remonta a 1978 con la inauguración de una panadería ubicada en Lagomar, Costa Dorada. Nueve años después, la calidad de los productos elaborados los llevó a dar un paso adelante y se comenzó con la fabricación de galletas con el nombre La Trigueña. La empresa familiar creció hasta posicionarse como líder en el mercado, en su rubro, dijo el empresario, quien destacó que la inauguración de la jornada significa una “apuesta al futuro y un renovado compromiso con el país”.
Asimismo, Ruben Pereira describió que la nueva planta puede ser considerada “planta modelo de producción a nivel local y regional”, no solo por su diseño y servicios, sino por la tecnología incorporada con un equipamiento que asegura los máximos requerimientos de higiene y seguridad del mercado, y el elevado nivel de automatización y procesos. La iniciativa permitió incrementar en 50% el número de plazas laborales, que se elevó a 120 personas en producción y distribución.
“Es la inversión de nuestros propios compatriotas, empresarios locales que deciden ir a más, no quedarse con lo que se tiene sino pensar en crecer. Es una visión de nuestro empresariado local y nacional que habla muy bien de nosotros como país”, reflexionó el Intendente Orsi durante su oratoria.
En la nueva planta de producción de 5.000 metros cuadrados se invirtieron unos US$ 9.000.000, incorporando un nuevo concepto de diseño que cumple con los más altos estándares de elaboración e inocuidad, con moderna tecnología, modelo en el país. Se prevé que el proyecto triplique la capacidad de producción de la empresa.
El Intendente Orsi indicó que la inauguración de esta planta “es parte de un reflejo, una descripción de nuestra historia como país. Inmigrantes que llegaron y se establecieron, primero, con una panadería y, después, una generación que se entusiasma y sigue poniendo rumbo al barco», en reconocimiento al trabajo de la familia Pereira.
Sobre el significado de esta inauguración, el Intendente Orsi enfatizó finalmente que “también es esa dosis, esa luz de esperanza y optimismo, cuando se habla de muchos puestos de trabajo nuevos, cuando se habla de cada puesto de trabajo que significa cada peso invertido, se habla de buenas nuevas, de optimismo, de que vamos por el buen camino. Tenemos el derecho y la oportunidad de seguir siendo optimistas”.
