octubre 29, 2025

HAY GRUPOS HUMANOS QUE ADOLECEN DE AUTOCRITICA Y FRENOS A SUS ACCIONES (1)

Master OPINION

Las personas en forma individual actuamos con recato y hasta con ciertos prejuicios para ser catalogados de desubicados, pero cuando se dan aglomeraciones para tomar decisiones como se decía el refrán, son como el chocolate vienen en barra para lograr mejores resultados, quedando generalmente en el anonimato sus posiciones de radicalismo irracional.
Todos hemos asistidos a congresos, asambleas, reuniones de todo tipo donde personas que parecían un pollito mojado se transforman en voceros de las peores intenciones, para lograr objetivos totales de una mediocridad de propuesta que deberían sucumbir antes de ser planteados.
Lo peor no es solo tomar decisiones equivocadas, lo más censurable es la falta de autocrítica frente a los fracasos de la propuesta o incluso, la complicidad de aquellos que no estando de acuerdo bajan su mirada hacia el suelo, dejando que lo aprobado cumpla todas las instancias de malas consecuencias y peores resultados.
Dan la impresión que se produce la misma transformación que se da cuando personas racionales están inmersas en olas de gente irreflexibles que solo responden a sus intentos de desborde físico u oral, dejando emerger desde sus poros las peores consignas de agravio hacia el semejante, especialmente a los conciudadanos que deben impartir justicia o simplemente mantener el orden.
Cuando alguien participa de la tribuna popular seguramente al final del partido termina adoptando los mismos cánticos, respirando el mismo aire y siendo igualmente irascible, porque la turba se va apoderando de sus actos, le envuelve hasta transformarle en uno más.
Desde los griegos la democracia funcionaba porque daba al pueblo el poder de tomar las grandes decisiones, sin embargo las votaciones por hechos tan determinantes como declarar la guerra a Esparta se tomaba al influjo de la oratoria de los grandes polemistas e incluso aquellos conciliadores, con posturas equilibradas de no confrontación permanente eran denostados e incluso condenados por la muchedumbre ansiosa de enfrentamiento o venganza frente a sus enemigos.
Nuestro parlamento está acostumbrado a escuchar a representantes que buscan sobresalir a cualquier costo haciendo afirmaciones de dudosa veracidad y al borde de la mentira , sin embargo sus seguidores les idolatran porque se animan a confrontar e incluso consiguen sus réditos electores en el próximo acto de sufragio gracias a ese espíritu irreflexible al borde de la irracionalidad, habiéndolo en todos los partidos, pero como es lógico con mayor intensidad en aquellos de oposición para recuperar lo perdido o acceder a un mejor posicionamiento.
Un escalón más permanente se encuentra la prensa amarilla o roja si de policiales se trata, que un día sí y otro también, hacen de su pluma un arma letal, para incentivar al odio con sus semejantes e incluso en el caso de los deportistas usando un lenguaje belicista que no me canso de denunciar, debiendo los fiscales citarles en lugar de los poco aprendidos jugadores, hinchas o dirigentes, que deberían tener media neurona más en funcionamiento para poder tomar el timonel de los clubes.
Siempre recuerdo en las asambleas de Facultad por diferentes temas, pero que no alcanzaban al ámbito interno y había que salir a la calle o a la plaza a dar la talla, como dice la murga, siempre salía algún destemplado que quería hacerlo de una manera más radical. Cuando se proponía volantear, decía que subiéramos a los ómnibus a repartir y dar un pequeño mensaje (hoy con la LUC no se podría hacer porque alterábamos la libre circulación), o que hiciéramos un piquete para que los autos pararan o incluso en lugar de piedras fabricar bombitas molotov (es el nombre de su creador casi un líder para los anarquistas verdaderos, nada que ver con el mamarracho de Milei, un verdadero payaso peligroso también por su discurso agresivo y confrontativo, otro que incita a la violencia y ningún fiscal uruguayo le paró el carro).
Siempre aquel muchacho hace más de 50 años, proponía realizar protestas más radicales, y como era buen estudiante, jugador de fútbol, militante e incluso excelente discurseador arrastraba a sus compañeros fácilmente porque con 19 años la vida pide pelea diría el Jaime, sin reparar que en realidad este triste personaje era un infiltrado al servicio de las fuerzas de seguridad que recibía un sueldo por sus mandados desdeñables (fue denunciado por el MNL con todos los detalles), e incluso una vez lo encontré en Pando en plena dictadura, cuando los bancarios hacían 5 minutos de paro, y este muchacho hoy recibido hacía de cliente, para detectar a los funcionarios que adherían a la medida (en el regreso a la democracia ocupó un cargo de secretario de una intendencia del norte de nuestro país de donde es oriundo).
Perdonen por usar anécdotas de mi vida pero siempre ayudan a entender ciertos comportamientos actuales, por ejemplo en una asamblea de estudiantes se discutía sobre un conflicto con la Cátedra de Química en la cual era Colaborador (grado 0 ahora sería becario) siendo el portavoz de los reclamos un alumno que posteriormente fue fundador del semanario La Juventud, director de radio Centenario y líder del 26 de marzo. Al final de la asamblea le dije medio en solfa que le ascenderían en la agrupación por el discurso realizado y sin mediar respuesta me denunció en mi doble carácter de estudiante con el objetivo de ser irradiado del gremio estudiantil, por sentirse coaccionado por mi afirmación.
En esa época ser desgremializado por el gremio a que pertenecía era una verdadera mancha a tu actividad dentro de la institución, la cual no prosperó porque algunos compañeros entendieron conociéndome, que mi actitud no podía analizarse como una forma de presión, aunque quedó en evidencia que sin querer, evidentemente le di en la matadura al aspirante a mejor sitial en la escala gremial.
Seguramente quien o quienes propusieron apagar la chimenea sean personas con aspiraciones de ascenso sindical y/o actuales dirigentes que desean mantenerse en sus cargos a cualquier precio, incluso haciéndose los distraídos o teniendo que defender lo indefendible, cuando se trata de todo un símbolo de la resistencia obrera al golpe de estado del ‘73, claro el riego y la valentía de aquellos obreros o incluso funcionarios especializados poco tenían que ver con los actuales.
Poco ayuda o incluso es negativo lo acontecido, para un gremio que ha sido denostado por querer sostener privilegios sobre los otros mortales defendiendo su propio prestador de salud por fuera del FONASA, en una actitud sectaria y emparentada con una visión nada solidaria con sus colegas de clase.
Además provocando poner sobre el tapete sus beneficios adicionales de canastas, incentivos, que lo hacen privilegiados dentro de la administración estatal.
Situaciones bastante similares se viven con los municipales de la capital, o los bancarios que todos sabemos que a iguales tareas reciben bonificaciones o exoneraciones, que mejorar sus sueldos en forma evidente.

Por motivos de espacio interrumpidos el análisis y lo continuamos la semana que viene,…..